Malinalco

Durante nuestra estancia en Malinalco, la cual fue muy corta debido a la falta de información que teníamos ya que pensamos que estaba a máximo dos horas de la ciudad de México y no fue así, en realidad hicimos aproximadamente 3:30 min. y al llegar ahí no era muy tarde pero si obscurecería pronto y no queríamos regresar con la noche sobre nosotros pues la carretera en algunos tramos se vuelve de dos carriles únicamente, uno que va y otro que viene. 

Este pequeño pueblo es bastante tranquilo, existe algo de movimiento provocado por algunos comerciantes que se encuentran fuera de la iglesia principal, estos, en su mayoría, son personas que venden comida. Nosotros decidimos comer en una pequeña fondita llamada "El Eden"en la cual por $50 comimos los deliciosos platillos típicos de la comida mexicana, como lo es el mole, arroz, tortillas y costillas de puerco en una salsa verde sazonada con nopales de la región.

Algunas de las cosas que me gustaron de Malinalco era la gran cantidad de restaurantes que contaban con galerías, en las cuales no siempre exponían las obras de los propietarios, sino también de algún otro artista de la región o mexicano. Una de las exposiciones mostraba corazones colgantes con diferentes imágenes en ellos, sin duda el que más me gusto fue el de la Virgen de Guadalupe, por los detalles y devoción que tengo hacía ella. 

Caminamos hasta que casi el Sol se oculto comiendo un helado y disfrutando Malinalco pequeño pueblo con gran trampolín artístico ¡QUE RICO! ver que como mexicanos impulsamos la creatividad y trabajo mexicano. 

Fotografías y Cronica: Alberto LLara